29 diciembre 2005

El Engaño

Sueño. tengo sueño. Y es que las noches parecen los días para mi, mientras los días siguen siendo días. El agotamiento es superior. El carácter comienza a descomponerse. Ya no siento el brillo del buen ánimo, y aunque trato de mantenerme alegre, son más las oportunidades en que me vence el pesimismo y las malas ideas.

- ¿Qué haría si la engañara?- dije.
- Creo que esto terminaría- fue la respuesta inmediata y absoluta.
- ¿ Y qué cree que haría yo si Ud. me engañara?- volví a preguntar.

Esta vez la respuesta se hizo esperar.

- Mmm...No sé... de hecho ya lo hago -

Fue como si hubiese blandido la daga y calculado fríamente el golpe. Abrióme el corazón sin piedad y la sangre comenzó a salir a borbotones. En un intento de contener la vida misma y en concordancia con mi filosofía volteé la respuesta en forma positiva:

- Pero eso no es un engaño...- aludiendo al conocimiento que tenía de su otra relación.

- Bueno, sí... depende como lo quieras mirar- dijo. y yo contesté conteniendo el emotivo llanto:
- Lo miro de la forma que duela menos-

Las miradas se cruzaron y se mantuvieron. Parecía que nos queríamos decir mil cosas y, como siempre, no dijimos nada por un par de minutos que parecieron una eternidad. Alguna suspiró y el contacto visual terminó.

- En verdad nunca lo había pensado, porque no está en mi engañarte, no podría hacerlo-

"Pero lo haces" pensé. Cerré los ojos con lentitud deseando haberme quedado así hasta el amanecer.

- No me crees ¿verdad?
- Quiero creerte
- Pero no me crees.
- Te creo porque quiero creerte- y quise explicar el gran acto de amor que es el hecho de que voluntariamente opte por creer aún cuando se sabe de una verdad distinta de la que se está creyendo. Es tan dogmático como la fe. Pero me cansé de sólo pensarlo y sabiendo también que no sería comprendida callé, una vez más.

Y no podía quitar de mi mente aquel viejo refran del repertorio popular: "El que nace chicharra muere cantando." El que engaña una vez volverá a hacerlo. Quien traiciona una traiciona siempre. Lo sé.
Y como dices siempre ( y tienes razón): "cuando hay amor del verdadero, se acepta, se justifica y se perdona todo".
Así también del otro lado "El que perdona una perdona siempre"
Claro, siempre que siga amando. Porque el amor también se acaba... ¿o no?
¿Durante cuanto tiempo se puede vivir perdonando, callando, compartiendo, evadiendo una verdad que te hiere en lo más profundo del alma?
Durante el tiempo justo.
El engaño duele. Y dule más mientras más tiempo se engaña.
El engañado sufre al descubrir el engaño. Pero sufre más cuando descubre el tiempo que se le engañó. El tiempo invertido/perdido DUELE.
Y si quien nos engaña lo ha hecho por no dañarnos, ha cometido el más vil y cruento de los daños.
Si en verdad el perpetrador nos quizo, aunque fuera un poco, ha debido dejarnos libres antes, dándonos la oportunidad de ocupar nuestro tiempo en la búsqueda real de la felicidad, no permitirnos perderlo en una quimera.
A quien no lo puede ver así, a quien encuentra mil justificaciones a su acto de traición mantenido en el tiempo, sólo puede tenérsele lástima por su egoísmo sin límites, por su canallada sin parangón.
Por eso yo prefiero la verdad... yo necesito saber. y desde este punto de partida soy libre para elegir... y voluntariamente elijo creer...te. aún sabiendo que cuando un animal mata una vez, volverá a hacerlo, porque el sabor de la sangre caliente produce placer adictivo.
Aún así, pongo mi fe en ti, como una muestra de mi gran, puro y noble amor.

28 diciembre 2005

I've Got You Under My Skin

No podía borrar la sonrisa de su rostro, ni el brillo de sus ojos...

Y claro! porque no podía evitar recordar los momentos de pasión vividos hacía apenas unas horas.

Mordió su labio inferior y sintió nuevamente el sabor del ser amado.Inspiró profundamente... sólo para volver a sentir su olor. Y otra vez sonrió.

En esos recuerdos se refugiaba cada vez que una sombra oscurecía sus pensamientos. Pero ahora no tenía que hacer ningún esfuerzo para recordar. Los pensamientos afloraban espontáneamente haciéndola volver a sentir... y su cuerpo temblaba sin control haciendo evidente su nerviosismo. ¡y esa exitante sensación que la recorría entera, que alzaba cada uno de sus vellos, que aceleraba los latidos de su corazón parecía no querer abandonarla!

Pensó en su corazón: Tic Tac... bom-bom...bum-bum. Sentía el bombeo en cada parte de su cuerpo. Para reduir tanto alboroto pensó en su corazón metafóricamente...¿cuántas veces había sentido eso mismo antes? ¿y cuántas veces le habían devuelto el corazón hecho trizas? imaginó un corazón reparado, pegoteados los mil pedazos, reconstruyéndolo casi amorfamente. Antes pensó que ya no volvería a latir y ahora... bom-bom, bom-bom ¿valdrá la pena tanto riesgo?

La miró y en su mirada reconoció el deseo, un poco de ternura y mucho amor. Pero era el deseo lo que ocupaba el centro de esa mirada. La vió inclinar un poco la cabeza y entornar los ojos (como para concentrar tanto frenesí) y comenzar a desnudarse.

En realidad estaba ya a medio vestir cuando llegó. No pudiendo contenerse la besó. con un beso cálido, tierno, mientras su mano comenzaba a recorrer su pecho blanco, inmaculado... y sintiendo la suavidad característica de su piel, acarició delicadamente, sin urgencia, buscando su debilidad, queriendo hacerla temblar, queriendo escuchar los murmullos, los suspiros, los quejidos que habrían de venir.

Al beso siguió el degustar de su cuello, su hombro... y paseó su lengua por aquellos lugares disfrutando cada milímetro de piel, de sabor, de olor.

La mano había llegado ya a aquel botoncillo erecto que sobresalía de sus pechos y acarició, apretó, pellizcó, mientras el brazo contrario atrajo hacia sí el cuerpo con firmeza desde la cintura...
Y comenzó el ritual de amar... la
Y de sentirse amada.
Y se dió cuenta que era esclava.
Y que ya no podría arrancarla de debajo de su piel.

27 diciembre 2005

Hace Días que no te escribo... y es que en verdad no tengo mucho que decir que no haya dicho ya: que te amo, que te necesito más que a nadie en el mundo, que tengo sed de tus besos (que ojalá no se acabaran nunca), que me haces temblar como una hoja a merced del viento de tormenta cuando me rozas, cuando me tocas, cuando me acaricias... que en mi corazón y en mi alma no cabe tanta emoción al saber que me amas tanto como yo a ti, que en mi mente no hay lugar para más pensameinto que no tengan que ver con tu nombre, que me faltan las horas para estar contigo, que no existen palabras para expresar todo lo que siento; que el deseo de ti, de tu cuerpo, de tu ser me escalvizan, me derriten, me desesperan.
Que se me acaba la vida cuando no estoy junto a ti, que mi mundo eres tú.
Que mi silencio no es otra cosa que un pensamiento o un recuerdo de ti, de tu sabor, de tu olor, de tus palabras al oído...
Que me arrebolas cuando me miras, que me estremezco con la ilusión de tenerte entre mis brazos y que vibro a mil cada vez que eso ocurre...
Son tantas las cosas que me haces sentir (de sentido y de sentimientos) que me haces pensar, que me haces creer, que no encuentro palabras suficientes para definir esto.

A veces siento tanto frenesí que el mundo se contagia de con mi alegría, y canto y silvo canciones de amor enajenado y miro a todos contándoles con mis ojos que tengo un secreto que me hace la persona más feliz del mundo: que te amo.
Otras veces siento una pena infinita al saber que no te tengo conmigo completamente, y sin mediar provocación alguna, se me comprime el corazón, el nudo en la garganta no puede deshacerse y las lágrimas luchan por salir a borbotones, contenidas tan sólo por la prudencia y la sensatez de la madurez, y porque sé que no puedo revelar la causa de mi angustia.
En otros momentos (los más) sólo me dedico a sentir lo que produces en mi cuerpo con tu sola cercanía, los miles de impulsos eléctricos que ocasiona tu presencia, la exitación que se apodera de mi cuando me besas, cuando sólo existimios tu y yo, cuando juntamos nuestras pieles...

ERROR

Estuve leyendo muchos blogs... en todos estos días me dediqué a leer blogs... blogs weVOnes, blogs chistosos, blogs tiernos, blogs tétricos, blogs profundos...
Todos, sin distinción quieren comunicar algo... aunque digan que sólo existen para desahogar.
Pero hoy algo me hizo clic! en la mitad de mi cerebro cuando leía el blog de alguien que admiraba. Pensé que se trataba de alguien inteligente, pero me equivoqué. Pensé que se trataba de alguien sensible. Y también me equivoqué. Y me da rabia conmigo misma saber que me equivoqué. Y quisiera en este miso momento tenerla sentada frente a mi, para decirle ME EQUIVOQUÉ CONTIGO!!!! Pensé que eras una sobreviviente, creí que eras un ejemplo...
En verdad sólo me estoy desquitando contigo por descubrir que eres tan humana como el resto, y que en esa humanidad me reflejo, y me niego a seguir siendo, a seguir sintiendo así.

19 diciembre 2005

AMOR PARA TODA LA VIDA





Todos nos mirabamos tratando de parecer impertérritos... tratando de contener el llanto por la pérdida... pero lo que mi padre nos tenia preparado nos dejó atónitos...
Tanto me impactó que se me grabaron sus palabras que fluyeron entre sollozos contenidos: "Hace 39 conocí a Mercedes. Hace 37 años y once meses iniciamos un proyecto juntos... entonces la saqué de la casa de sus padres y hoy... hoy la entrego en la casa del padre eterno. Del fruto de nuestra unión son cuatro hijos y, hasta el momento, siete nietos. Alguien nos dijo: hasta que la muerte nos separe...y ..y yo me pregunto si en verdad la muerte podrá separarnos... su cuerpo nos ha abandonado, más su espíritu sigue vivo en cada uno de nuestros corazones... mientras la recordemos, ella estará viva. y cuando sea nuestro momento de partir, ella nos recibirá. No hay muerte que nos separe: nuestro amor es eterno"

A sus lágrimas se unieron las nuestras. Nadie pudo seguir manteniendo la compostura, y mientras desahogábamos nuestra pena, el cura nos dio la última bendición.

Mi madre no era perfecta. Pero era mi madre. Y mientras enjugaba mis lágrimas e intentaba respirar profundo para evitar los sollozos, pensé: "en verdad él la amaba... y ahora, recién ahora, ella lo sabe con certeza..."

Yo quiero saber quien me ama. Pero para saber quienes me aman he de decirles primero que los amo... y sepan que a cada uno de uds. le tengo un cariño especial.

Amigos, gracias a los que estuvieron conmigo, gracias a los que quisieron pero no pudieron... gracias a los que me llamaron, gracias a los que me dieron una palabra de aliento o un abrazo silencioso...gracias a los que tuvieron un pensamiento de condolencias para mi...
AGRADECIMIENTOS POR CONDOLENCIAS , AGOSTO 2004.


Hace poco más de un año mi madre dejó de molestarme, dejó de criticarme, dejó de humillarme, dejó de menospreciarme, dejó de insultarme, dejó de pelarme, dejó de pelearme, dejó de menoscabarme... pero también dejó de acompañarme, dejó de aconsejarme, dejó de enseñarme, dejó cuidarme, dejó de apoyarme, dejó de amarme... (quizás no, me susurra mi ángel al oído). Y lo cierto es que a veces la extraño.

Lo más irónico del mundo es que siempre pensé que ella era "el elemento disociador" de la familia, y que su amargura provenía de una tremenda cobardía: nunca pudo separarse. En verdad nunca quizo hacerlo. Su "amor" por mi padre era tan grande que se postergó hasta en lo más importante de su vida. Y así se le fueron los años.
Yo creía que eso no era amor. Pensaba que era cobardía, comodidad, flojera, acostumbramiento, posesión, incapacidad, autoflagelo... cualquier cosa menos amor.
Tampoco pensé que era correspondida. A mi padre se le acusaba constantemente de infidelidades, y en mi fuero interno, siempre pensé que él la menospreciaba, que él se sentía (y era) superior a ella: más culto, un profesional universitario! (qué vacuidad), mejor hablado, mejor lector, con opinión, apuesto, etc. Todo lo contrario a mi madre. Y eso le daba a él el derecho de algunos affair sin mayor importancia (qué machista!)
La vida se le amargó, creo yo, y en la oscuridad de esa amargura ella SEGUÍA AMÁNDOLO!
Por eso, cuando me contó una verdad, de esas VERDADES con mayúscula, yo también la menosprecié, y mi posición frente a su no "corte de la relación por sanidad", fue dura y afirme:"¿porqué sigues con él, mamá? ¿porqué no rehaces tu vida y te dedicas a ser feliz? tu infelicidad te la has buscado tu misma! él no te ama. y nunca lo hará, hagas lo que hagas en esta vida!"
Y claro! Cómo no decirle eso si veía que era como una especie de dependencia la que ella tenía con respecto de él. Todas sus decisiones eran a partir de la opinión de él, de los gustos de él, del tiempo de él... Toda su vida giraba en torno a él. ¡Y él ... era GAY! oséase, BIsexual.
Pero cuando murió, y escuché de la boca de mi padre esas palabras... y cuando veo que cada día que pasa él se va apagando más y más (a pesar de sus múltiples incursiones homo), cuando veo la tremenda foto de mi mamá que se mandó a hacer después, foto que lo acompañó cuando le pedí que se viniera a vivir conmigo a miles de kilómetros de su soledad y de sus recuerdos, cuando la cita en cada oportunidad, cuando veo que cuenta los días que le faltan para morirse... entonces me doy cuenta de que en verdad la amó. Que su forma de amar no es la que a mi me gusta, pero no por eso es menos válida. Que en algún momento tuvo que elegirla (no una sino muchas veces) y que sólo la fuerza de su amor los mantuvo juntos a pesar de las visicitudes de sus vidas...
Mi mamá no alcanzó a saber que yo también era Gay. No por que yo no se lo hubiera contado, sino porque no alcancé (mi proceso ha sido durante el año pasado recién). Y aunque sé que me habría criticado y habría sufrido (recuerdenme hablar del sufrimiento), también sé que a la larga lo habría aceptado y habría querido también a mi pareja.
Y, a pesar de todo, debo reconocer que los admiraba, y de alguna forma, emularlos, porque también quiero estar con mi amor por toda mi vida, a pesar de las vicisitudes de la vida....

17 diciembre 2005

La Caricia

Sus manos acariciaron la zona abdominal queriendo expresar el afecto, pero tambien queriendo curar el dolor estomacal... así lo entendió ella. Pero cuando se deslizaron, a la zona púbica, a más arriba, a la zona torácica, queriendo despertar el deseo, se encontró con una fría muralla de hielo. las palabras que detuvieron la acción sonaron a advertencia y en ellas no había flexibilidad. insisitió con las caricias en los puntos débiles ya conocidos, pero ésta vez el movimiento no sólo fue detenido con frías palabras, sino con unas suves pero firmes manos.
Sin embargo, sabía que el cuerpo que acariciaba respondería a su contacto. No, no era el dolor físico lo que le impedía encender el cuerpo amado (ningún dolor nunca fue obstáculo): había algo más. Algo que venía manifestándose sutilmente hace días. En su mente las conjeturas iban haciéndose espacio entre las preguntas y en un impulso buscó el beso tranquilizador... beso que no encontró.

El corazón se comprimió, no sabía si por angustia o tristeza y la decepción reinó.

Sin palabras, los cuerpos, entrelazados aún, comenzaron a separarse lentamente y el silencio, cada vez más espeso, impedía incluso un movimiento reconciliatorio. Finalmente dejaron de abrazarse.

Masculló entredientes una adiós sin respuesta y emprendió la marcha con desazón, pero sin mirar a trás.

Y dejó el lugar apurando el paso, como si así se sufriera menos....

13 diciembre 2005

La Petición



I don't belive!


Reclamóme el no haberle pedido formalmente la mano.
haciendo acopio de fuerzas, hinco la rodilla, tomo suave tierna y temblorosamente su mano, y con el corazón palpitando en la garganta logro esbozar una frase corta, pero asertiva "mi amor... quiere ud. estar siempre conmigo?"
Con expresión burlona en su rostro, ella responde:"¿sólo estar?"
Sabiendo que había equivocado las palabras y con mucho más nerviosismo, arremeto con un "¿quiere ser mi novia?"
Y ella, sabiéndose amada, sonríe y pregunta "¿sólo su novia?"
Replanteo entonces la pregunta, de rodillas aún, y balbuceo "quiere Ud. casarse y estar juntas en las buenas y en las malas, en las duras y las maduras, en el frio o el calor, en el..." me interrumpe abruptamente: "Sería bígama" y su risa estruendosa que aún retumba en mis oídos me recuerda dolorosamente que no es libre y que ese compromiso que reclamaba (y al que yo tan inocentemente accedí) ya había sido hecho con otra persona.
No sé como soporté, estoicamente creo, como logré que las lágrimas no asomaran en ese preciso instante.
El golpe acusó de inmediato y sentí como la presión arterial disminuia considerablemente. Comencé a sentir frío y una inmensa necesidad de escapar. Era como morir por dentro. El hielo de la verdad detuvo por una fracción de segundo mi corazón.
Ella tomó entoces mi rostro con ambas manos y sin dejar de sonreir, me besó con infinita ternura, y ¿por qué no decirlo? fue un beso lleno de amor. Pero nunca dijo: "Si, quiero".
Yo me alcé de la genuflexión. Respieré profundo y comenté una trivialidad. Salí de la estancia, di un par de vueltas inútiles y sin sentido en la habitación contigua y antes de dejar que las lágrimas rodaran por mi faz, me encerré en la oscuridad del cuarto de baño, permitiéndole al dolor y la decepción, a la rabia y a la impotencia, a los celos y a la amrgura, que reinaran en mi por unos momentos. Luego una tristeza enorme me invadió. Y rogue al cielo consuelo. Y yo, la atea, la incrédula, recé...y yo, la hija rebelde y malagradecida oré "Madre, dame tu abrazo es lo único que necesito hoy"
Unos minutos más tarde, ya estaba repuesta, con el torrente sanguíneo normal y la respiración pausada. Y salí, con la flema de una reina que abdica la corona en pos del bien común...

El Recuerdo

La mente me jugaba la mala pasada al recordar...
porque al recordar sentía como el ardor del deseo se apoderaba de mi cuerpo nuevamente...
y recordando mordía nuevamente mis labios, saboreando... sintiendo de nuevo el sabor de los suyos.
Alcé mi mano, para ver el dorso y liberarme de aquellos pensamientos, y al mirarla, mi mente, otra vez, me llevó a los momentos en que la paseé por su espalda, sintiendo su calor, su suavidad, su temblor... y volví a ver como mis dedos se enredaban en sus prendas, acariciándole, y al mismo tiempo sintiendo la urgencia de quitarlas.
Un estremecimiento me recorrió. Respiré profundo, como si el aire que entraba a mis pulmones lograra que yo dejera de pensar en ella, pero no fue así.
me obligué entonces a rspirar profundo varias veces...sonreí al constatar lo inútil que eran mis esfuerzos: no podía (o no quería) dejar de pensar, dejar de recordar, dejar de sentir, aunque sea un ápice, lo que había sentido al estar en sus brazos, al oir sus murmullos, al sentir el acelerado palpitar de su corazón, su respiración entrecortada, sus movimientos ondulantes presos del deseo que no hacían otra cosa que aumentar mi propio deseo. No. No quería seguir recordando. Quería Re-vivirlo. Voler a vivir la intensidad de esos momentos, que ocupaban gran parte de mis horas en este día.

Bajé mis revoluciones con otro pensamiento, otro recuerdo: sus palabras detallando todo lo que yo habría de sentir al recordar, dejando entrever que lo mismo que yo había vivido (¿acaso con la misma intensidad?) era ya parte de sus vivencias ¿habráse visto osadía tan grande? ¿cómo os atrevéis a siquiera pensar que lo por mi sentido pueda ser por otro vivido?
Y el monstruo de los celos comienza poco a poco a apoderarse de mi, de mis pensamientos: ya antes "alguien" (quiero saber quien...no. no quiero saber quien, porque ya lo sé) te ha hecho sentir...

Perdón... adiós... Perdón

Hoy quiero hablar un poco del perdón.
Parece que antes ya hemos hablado de eso, pero yo ahora quiero hablar no de lo que soy capaz de perdonar, sino en si merezco ser perdonada.
Creo haber reconocido que me equivoqué. Y antes, en la conversa nocturna por telefono, tambien te lo dije, y me dijiste que no podias perdonar o disculpar algo que, en primer lugar, no te habían pedido, y en segundo lugar, no tenías nada que perdonar.
Entonces, me pregunto, si erré, reconozco que erré, pido excusas, y no se me da la chance...¿ de qué soy merecedora?, no creo haberla cagado tanto como para que sufra las consecuencias que se me endilgan.
Tampoco sabia que debía pedir expresamente perdón por una idiotez. (recuerdo las innumerables veces que me han maltratado y que he perdonado sin que me lo pidieran, además ni siquiera se me han dado excusas, solo un par de veces se me ha hecho ver que he sido yo quien ha buscado la humillación gratuitamente por no comportarme de acuerdo a lo establecido con anterioridad)
El perdón le ayuda a uno a dejar ir. Y yo en eso ya soy experta.
Todo eso de lo que tu me hablas, del tiempo, de las desisiones correctas en los momentos correctos... ya soy experta.
No olvides que ya he vivido eso alguna vez.
Y por lo tanto ya conozco de mis tiempos ( los tiempos que necesito para estar bien) y sé perfectamente que puedo superar cualquier pena a la que me enfrente la vida, especialmente las pérdidas (las he tenido de todo tipo: he debido enfrentar la muerte de seres queridos cercanos (hijo, madre), he superado el trauma del aborto, o de la violación, he enfrentado el duelo del divorcio indeseado, he enfrentado en más de una oportunidad la traición del ser amado y conozco ese dolor a fondo. He sufrido la violencia psicológica y también la física, de manera que ya hay pocas cosas que puedan hacerme tambalear. Incluso pérdidas más simples (aunque no menos dolorosas) como que mi hija mayor no viva conmigo y esté a tantos km, o como que las chicas tengan que tomar vaca separadas de mi...) a todo eso le busco el lado positivo para mi, de manera que no me quede sentada sufriendo y mejor sigo adelante.. la vida que elgí la elegí dolorosa. Y en esos dolores siempre hay algo de felicidad.
No mi amor, no es nuevo para mi el dolor. Ni como se va desarrollando, ni como se debe enfrentarlo. Lo sé. Y sé que aunque este ha sido el más grande amor que he sentido, sobreviviré a la ruptura (si la hay), a la lejanía, a la ausencia.
Siempre me lo digo, (y capaz que sea un presentimiento o una premonicion) y si he de sobrevivir a este amor será con la frente en alto, sin derramar lágrimas públicamente, sin andar dando lástima por la vida, DIGNAMENTE: lo que se me había quedado escondido por ahi en algún lugar de mi mente. (entendiendo que dignidad es lo que uno merece o no merece)
Decir adiós no va a matarme. Y mis adioses son definitivos. Tal vez me cuesta decirlos, pero cuando los digo zaz! ya no hay vuelta atrás. Para mi no existe eso de darse un tiempo. No creo en ello y menos aún a mi edad y con mi experiencia.
Como también soy poco paciente (aunque reconozco que en esta relacion he aprendido a ser muchisimo mas paciente), prefiero las inyecciones rápidamente y sin historias... lo que ha de doler que duela ya. Para empezar cuanto antes a curar las heridas y los dolores desde el fondo.
En todo caso, amigui, la premura de mis pasos no depende enteramente de mi. Todavia hay espacio en mi corazón a la esperanza de la reconciliación, en base a la firmeza del amor, en base al reconocimiento de los errores, y en base a la voluntad de enmendar. Creo en la recosntrucción y sobre todo creo en el perdón, que cuando lo hay verdadero, el bálsamo de alivio y a veces de alegría, es agradecido hasta el infinito.

En mi corazón no hay rencor. Y las faltas de las he sido objeto están más que perdonadas(algunas incluso olvidadas..) Y las faltas de las que se me acusa, como no son enteramente veraces, y han sido envueltas en un manto de desconfianza inmerecido, se han hecho invisibles a los ojos de mi conciencia.. me siento inocente, y como tal, me siento ofendida por la acusacion.

La rabia, ya se ha ido. Y la cabeza a estado fría siempre. (excepto en algunos momentos en que se calienta todo...incluso la cabecilla). Es eso, el ardor que me provocas lo que hace que me inmovilice para poder pensar y no equivocarme... porque cuando estás en mi, sobre mi, bajo de mi; cuando tus tenues movimientos pelvíticos me conectan con la infinitud de mi amor, cuando veo en tus ojos libídines la emoción, entonces creo que nada es tan terrible y con paciencia (esa misma paciencia que tienes con mi impulsividad) lo nuestro va de mejor a mejor y mejor y mejor...

salud por la fe
rox

12 diciembre 2005

originalidad de la propuesta

Acabo de escuchar a un gil en la TV que hablando de politica y del resultado de las elecciones, q dijo esta frase que sirve de titulo a este primer blog? y sin saber de que mierd.. estaba hablando (especificamente, digo) la frasecita me quedó dando vueltas y vueltas en el torbellino de pensamientos que no dejan descansar mi mente ni mi cuerpo, y por lo tanto estoy aki escribiendo webás a altas horas de la noche en vez de ir a mi camita... que está abandonada porque, precisamente, no hubo "Originalidad en mi propuesta" : con un "¿te vas a quedar hoy?", casi como un ruego silente, desganado, cansado (de tanto esperar en las colas pa cumplir con el deber civico), hasta insolado ( por la misma wea que dije antes eufemisticamente), y al decirlo ya me di cuenta de que más que una invitación-insinuación-fruición, sonaba como advertencia de fomedad... y en su cara vi como comenzaba a dibujarse la excusa.
Lo peor fue que ni ánimos tenía de insistir, y la dejé ir, solita, media tristona y un poco decepcionada.
Y como suele suceder, a esta hora ya estoy arrepentida de no tenerla a mi lado, de estar regaloneando y seguramente de algo más muy, pero muy delicioso... por eso no quiero regresar a mi cama, a pesar de apego que le tengo (se pueden hacer casi todas las cosas más placenteras de la vida en ella), y a pesar de que tengo que levantarme temprano mañana ( o sea, hoy).
y ni siquiera puedo prender un cigarrillo, porque ya dejé de fumar.
en fin, recordé que la autosatisfacción erótica también lograba que conciliara el sueño. no sé si es socialmente aceptado, pero desde que soy felizmente lesbiana (x monógama), la aceptación social me importa un bledo (y eso que no sé que xuxa es un bledo)
saludos
rox

Nombre: rox
Ubicación: Chile

Sin Inteligencia emocional. mona por naturaleza.